Entrevistamos a la delegación comercial Silvia Córdoba Lefler (Candeleda, Ávila), quienes nos cuentan cómo trabajan cada día para dar la mejor atención presencial a los clientes de su zona.

¿Cómo es vuestro día a día con los clientes que os consultan tanto de forma presencial como por teléfono?

En estos momentos, nuestro trabajo diario se ha incrementado exponencialmente debido a que muchos clientes nos consultan de manera presencial sobre los problemas que tienen, por lo que prestamos el doble de atención comercial que antes de la crisis de precios del mercado energético. Lo importante es que intentamos solucionar todas las incidencias de nuestros clientes a diario y ponemos mucho esfuerzo en ello.

Reciente, un cliente de vuestra delegación ha ganado uno de los concursos de CHC Energía por darse de alta en el Club CHC, ¿cómo valoráis este tipo de iniciativas de cara a los clientes?

Este tipo de acciones e iniciativas son muy positivas para los clientes y para la delegación. Para nosotros ha sido un rayo de luz en medio del océano, ya que este cliente se fue contento de nuestras oficinas, lo cual ayuda mucho.

¿Por qué es importante que una empresa familiar e histórica como la vuestra tenga fuerza en la zona rural en la que estáis?

Silvia Córdoba Lefler y la distribuidora Hidroeléctrica Virgen de Chilla tienen una importancia muy grande en Candeleda (Ávila). Es una población pequeña, donde nos conocemos entre todos y, por ese motivos, los clientes confían en nuestro trabajo.

¿Cuáles son vuestros valores diferenciales frente a la competencia?

Ahora mismo tenemos una gran y, se podría decir que única, diferencia con respecto al resto de comercializadoras y es que nosotros ponemos nuestra cara y nuestro nombre frente a los clientes. El resto no lo hacen porque no tienen atención presencial.